Hace unos meses, en
una cerveza en un bar, la gente de la Ermita me preguntó que si quería
ayudarlos en un teatro musical que estaban montando, que necesitaban manos y yo
dije que sí sin saber muy bien donde acabaría todo esto.
Mi fe en ese momento no es que estuviera precisamente en el
lugar mas alto, todo lo contrario, para mi las bienaventuranzas, dichosos los
pobres de Espíritu y la parábola del Hijo prodigo eran mis preferidas….
Justificaba en esas letras el apartarme de Dios, justificaba mi abandono. Quería
volver a tener contacto con todo aquello que me llenaba pero al mismo tiempo me
avergonzaba de mi misma. Empecé entonces a subir a la Ermita, habían muchas
cosas que hacer, preparar escenas, hacer diálogos, preparar escenarios,
telones, etc…
El día que se preparó el dialogo creo que mas de dos nos
quedamos un poco con una sensación de tranquilidad…. Habían tantas cosas en ese
dialogo que formaban parte de mi vida…. Entender el sufrimiento de muchas
personas, entender una enfermedad, una muerte repentina…. Entender, que alguien
joven fuera llamado para sentarse junto al Padre, es algo que no es fácil, pero
escuchar esas palabras me dejó en mi corazón al mismo tiempo de paz una
intranquilidad enorme, era como darme
cuenta donde me había metido, íbamos a explicarle a la gente o al menos a
intentarlo explicar ese sufrimiento, a explicar como hace 2008 años alguien dio
su vida por nosotros, y lo dio sabiendo lo que le venia encima, sin pegas, sin
reproches, sin abandonos, sin autocompasión. Y ahí lo que mas sentí fue miedo,
sí, miedo de no saber lo que me estaba pasando, ni porque yo estaba allí, en
medio de un grupo de gente, que desde el principio me trato como una mas, que
desde el principio me hizo participe de todo como si siempre hubiese estado allí….
Con ellos, entre ellos…. Eso me daba miedo….
Con muchísima ilusión, íbamos pasando cosillas, los hierros
para el telón, las cortinas larguísimas que a veces no parecían tener fin,
coser túnicas… cada uno, en la medida de
sus posibilidades aportábamos nuestro pequeño saber, y si no sabias aprendías,
porque yo aprendí a hacer cosas en papel maché jejeje, a cortar a medio coser…
y sin darnos cuenta entre nosotros se iba creando una unión especial, mi primer
juego del amigo invisible con la gente del musical llegado Navidad, mi primera
Noche buena, mi primera Noche Vieja… y sin darnos cuenta todos íbamos formando
un poquito unos parte de otros, crecía en nosotros una amistad, una confianza
realmente hermosa.
Algunas escenas se resistían, y ensayábamos una y otra vez…
muchas veces sentada en los bancos de la Ermita, miraba al Santo Cristo y decía
porqué estoy aquí Señor? Qué quieres de mi? …. Había en mi una mezcla de miedo
y al mismo tiempo ilusión por todo lo que estaba pasando pero todo iba tan
rápido. Un día recuerdo que me ofusque tanto que le decía a Pilar que no sabia
porque estaba ahí, que yo no merecía eso, y le decía…. y si soy yo la que se
empeña en estar junto a El pero El no quiere, dicen que muchos son los llamados
y pocos los elegidos… y si yo me empeño en ser elegida pero no es así? Una sensación extraña se apoderaba de mi, una
sensación de no entender muchas cosas, de ese miedo que estuvo conmigo y aun a
veces siento. Pero me sentía útil, y tenia ilusión por todo aquello…. Sin saber
muy bien donde íbamos a acabar… de echo, solo mis padres y pocos mas de mi alrededor
sabían lo que estaba haciendo.
Después de muchos meses de trabajo llego el 2 de Marzo,
primer estreno en la Ermita…. Los nervios no se si hubiese un medidor…. Yo los había
sobrepasado seguro, ese día fue bonito, en convivencia desde la mañana, preparamos
todo, desmantelamos la Ermita, preparamos escenario, plancha, peluquería,
pintura, todo estaba listo. Javi, nos junto en la sala y dijo unas palabras para
tranquilizar y para saber cual era nuestra misión ese día, transmitir el mensaje que nosotros
llevábamos preparando tanto tiempo nos
cogimos las manos… y aquella sensación de paz, volvió a recorrer todo mi
cuerpo. Fue un Padre nuestro más especial que nunca….
Nervios, Emoción, Intriga….. y al final todo un éxito, la
gente aplaudía y nos felicitaba, entre nosotros los abrazos eran descargas de
energía pura y dura que había estado plasmada en el escenario desde el primero
hasta el ultimo. Ese día no podía dormir, pero tampoco sabia que había pasado,
que me había sucedido, un par de días mas tarde todos comentábamos pues lo que
la gente opinaba, todo eran felicitaciones, todo eran emociones. Habían
testimonios que llegaban a ponerte la piel de gallina a la gente le había
llegao el mensaje, mi compañera entendía
el sufrimiento y la muerte de su madre, su marido entendió en el teatro porque
su madre parecía tan fuerte cuando su hermano murió, y lo entendió al ver a
Maria junto a su hijo al lado de la Cruz, siempre junto a El hasta el último
día. A partir de ese día se nos propuso
hacer esto en mas sitios…. Benizar que ya estaba previsto, S. Juan Bosco, la
NAO, y otros tantos a los que hemos terminado por decir que no, por que no había
tiempo físico para hacerlos.
Al día de hoy llevamos tres musicales, tres con escenarios
diferentes, con testimonios diferentes, con problemas entre nosotros
diferentes…. Para mi en cada uno he aprendido algo distinto. En el primero me
dijeron que ahora nos tocaba Evangelizar…. A mí jajaja, Evangelizar, yo que le había
dado la espalda al Padre cada vez que podía, yo que siempre le hablaba con
reproches porque no entendía mi vida y lo culpaba a El, yo que tenia mas miedo
que hambre… pero, sé y hoy confío que Dios siempre estuvo a mi lado, que como
dice en el musical todo el tiempo que vi
solo unas huellas en la arena era El que me llevaba en sus brazos, El que siempre me ha perdonado todo, que me
ha hecho regresar a la casa del Padre una y mil veces. Cuando me confirme, en
la imposición de manos, sentí de corazón la venida del Espíritu Santo, y ahora
en los tres musicales, sé que ese mismo Espíritu ha estado entre nosotros y con
nosotros, que se ha metido en mi de una
forma sobrehumana que Dios ha utilizado mis manos, mis pies, mi alma para poner
mi granito de arena para que el resto del mundo lo conozca un poquito mejor.
Mis miedos son ahora mucho mas pequeños, alguien me dijo que
mi tiempo no era el tiempo de Dios, y ahora se que es cierto, alguien me dijo
que tenia que confiar en El porque El nunca nos deja solos, y ahora confío mas
que nunca… y si tengo miedo a algo es a que todo esto se me escape de las
manos, miedo a salir corriendo una vez
mas. Se que todavía me queda mucho por andar, pero se que El seguirá siendo mi
guía, que Dios dispone, dios provee, y
que no tengo que tener prisa… Confío en Dios,
y aunque todavía me de terror decir haz conmigo lo que quieras, que se
haga en mi tu voluntad, se que será así…. Y ojalá, no pierda nunca esta
sensación, ojalá este camino que he empezado ahora no lo abandone, que Dios
cuando el musical acabe, pues me de otro trabajo por hacer, que me siga
utilizando, y que el Espíritu que en mi ha calado tan hondo no me deje nunca. Y
que como dije en el blog, que cuando volví a la casa del Padre, El me espero
con los brazos abiertos, brazos que eran Javi, Mari, Divi, Piedad, Conchi, Pilar,
Cano, Pili, Mariano, Higinio, Gema, Cristi, Eva, Eli, Paco, Paqui, El Javi
pequeño con sus besos, Iria, Laura, Eugenio, Manolo, Pedro, Lola, Pascual,
Usa….que me fui gastando todo el Amor que el me había dado y ahora a su vuelta
me da todo esto, a toda esta gente, y todas estas Emociones y sensaciones de
Amor, Paz y sobre todo Confianza…. Gracias Dios mío, porque he estado enferma y
me has sanado, he tenido hambre y sed de ti y me has saciado…. Gracias por
ponerme en mi camino a toda esta gente de la que todavía me queda mucho que
aprender…. Y dame fuerzas para no salir corriendo, para seguirte siempre como
ahora, para tener siempre hambre y sed de ti… Y para que sea mi vida la sal y
que sea mi vida la luz que solo tu me das. Y como dice una canción:
Que te puedo dar que no me hayas dado Tú
Que te puedo decir que no me hayas dicho Tú
Todo lo que se, todo lo que soy, todo lo que tengo es tuyo.